miércoles, julio 11, 2007

La dulce vida


Ayer estábamos en un parque y pasó un camioncito de paletero con musiquita y todo.

Acá en Sacramento por cierto, no es tan raro ver a señores empujando carritos de paletas muy a la mexicana.

Bueno, pos que voy a comprar un par de paletitas y me encuentro con la sorpresa de que venden unas que llevan la marca de Lucas, la marca creada por una empresa originalmente regiomontana que se dedica a la fabricación de dulces con base en tamarindo y chile (bueno, antes eran tamarindos y chiles naturales, ahora quién sabe de qué estarán hechos).

Yo fui empleado en Lucas como diseñador gráfico. Entre los muchos proyectos que realicé para ellos, estaba éste de la etiqueta en cuestión, exclusivamente para el mercado norteamericano.

De esta etiqueta yo diseñé la tipografía de la palabra "CHAMOY" con brillitos y la carita del chabacanito haciendo gestos.

Trabajar para Lucas representó una agradable experiencia. La oficina de diseño estaba pegada a la oficina de Hugo Martínez, uno de los hermanos dueños fundadores de la compañía y director general.

Como sucede conmigo en los chorrocientos trabajos que he tenido, pronto Lucas no representó más reto para mí y se limitaba a una rutina en la que había poco espacio para progresar.

Por esos tiempos Charly Rodríguez, un cineasta de Monterrey me estaba invitando a ir a trabajar con él. Así que después de una pequeña negociación, le dije a Lucas que me iba.

Durante mi último día en la oficina, fue precisamente Martínez quien me dijo que lamentaba que me fuera de la compañía. Pero que lo lamentaba por mí, porque venían cosas muy buenas dentro de la empresa. No sé a qué se refería, pues meses después venderían la compañía a Mars, el gigante dulcero norteamericano, con su lógico recortadero de personal.

Si él pensaba que porque iban a vender la compañía, habría más oportunidades, estaba equivocado. Las empresas grandes que absorben a otras no tanto llegan a imponer su ley, y sobre todo, buscan "recortar gastos" y a eliminar "funciones duplicadas" dando prioridad a su personal de confianza.

De todas formas, el tiempo que trabajé para ellos fue de intensa producción y de aprendizaje del mercado y de las estrategas y trucos habituales de ese tipo de compañías.

Por cierto que por acá se hace mucho énfasis en las escuelas y todo tipo de comunicación dedicada a los padres de familia y a la nutrición de los niños, que eviten todo tipo de dulces provenientes de México, debido a los altos contenidos de plomo, sobre todo los que contienen chile y tamarindo.

Otra velada práctica de proteccionismo comercial del campeón del libre mercado y la competencia comercial. Si los dulces mexicanos fueran tan malos, ¿porqué los dejan pasar la frontera?

Ah, pero que al gobierno mexicano se le ocurriera advertir contra los chocolates, chicles, pastillitas, refrescos, frituras y todo tipo de chatarra proveniente de E.U.A. por sus altos contenidos de azúcar e ingredientes elaborados con maíz transgénico. No, pues para empezar, no creo que Felipillo lo haga, y por otro no creo que si se le ocurriera, lo dejaran.

Después de Lucas, tuve la oportunidad de trabajar con mi propia compañía, Hongo Visual, para otras dos empresas dulceras en Monterrey, PROCOPSA, creadora de la marca Zumba Pica y de las famosas Cucharas y una variante de los vasitos con chile, y para quienes desarrollé el personaje de Zumbi, un monito verde con alas y antenas que según mi teoría no es más que un mosquito extraterrestre.





También con ellos colaboré en el desarrollo de un producto nuevo llamado Kucho.

Simpático y riquísimo.
Otro de mis clientes fue Indy, una compañía perteneciente también a la familia Martínez, pero administrada por Roberto, quien también es productor de cine y TV. Con ellos desarrollé proyectos muy interesantes. Con una visión muy 'cinematográfica'.




La verdad es que el mercado infantil como que se me da.

La neta es que nunca he dejado de ser un huerco que juega con carritos y hace chistosadas para pasarla bien.

Por acá he visto algunos de estos diseños ya sea en los anaqueles de las tiendas o en las despensas de las casas que he visitado, y la verdad me siento muy contento, por mí y por los buenos empresarios que me han dado la oportunidad de trabajar con ellos, aunque mal les pague a veces.

Así somos los escuincles malcriados.

Si quieres ver más de éstos diseños, te invito a la nueva sección de Diseño Gráfico de este blog, espero la disfrutes.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Saul
llevo mas de dos horas leyendo ti blog,son las 2:30 de la am aunque entre a trabajar a las 8:00 no importo leerte, siempre con un talento nato, que desperdicio que te hayas ido del pais y estes aportando tus ideas en otro lado
"al final como siempre dice el gobierno, hay fuga de talentos""
saludos Adrian Cantu

Meshe Creations dijo...

Se me hizo agua la boca, de tan rico Blogg. Los miembros del club Zumba Pica de Victorville Disfrutan de lo chilosito de los dulces mexicanos y de tu natural simpatia.
We love you!!!!!!!!!